Autorretrato de Sandro Botticelli, 1475.
Autorretrato: el autorretrato es considerado como uno de los ejercicios de análisis más profundos que puede hacer un artista. Implica escrutarse el rostro y conocerse hasta tal punto que la expresión que tenga en ese momento se traduzca en el dibujo o la pintura que aborda.
En un autorretrato interviene la subjetividad del artista, ya que el pintor o fotógrafo se representa a través de su propia mirada: su estado anímico se pone de manifiesto en la elección de la pose, los gestos, los colores de su ropa y de su piel.